Tras varios meses de confinamiento, continuamos con ganas y mucha fuerza la temporada de cursos de verano, sembrando nuestro primer domo de la era tras-coronavirus en Asteasu, País Vasco, rodeados de verde, de montes y de frescas mañanas.
Gracias a todo el grupo por participar tan enérgicamente y gracias especialmente a Carlos y a Nerea por la cálida y generosa acogida a todos los participantes y la atención al grupo. ¡suerte a tod@s con vuestros proyectos geodésicos! ¡Y a sembrar!